Visitas guiadas a la Legislatura: estudiantes coinciden en que “se aprende jugando”

Un grupo de 26 educandos, de séptimo grado, turno tarde, del Instituto Jesús Niño, participó del programa de visitas guiadas que ofrece la Cámara de Representantes a través de la Secretaría Legislativa del Centro del Conocimiento, con el propósito de conocer la Legislatura y el trabajo parlamentario.

El recorrido consiste en exposiciones dialogadas y visualización de videos para conocer la historia del Parlamento Misionero, tanto en el Recinto de Sesiones, así como también en el Embajador Legislativo Misionero, donde, además, se interiorizan en las funciones y roles del Poder Legislativo, y participan de competencias grupales en red.

Una vez culminado el recorrido, la estudiante Mikaela Garnica resaltó: “aprendí mucho acerca de cómo se hacen las leyes” y expresó, “me gustó como nos enseñaron, y también la forma en que nos explicaron con LEGIS, el robot, en el Embajador Legislativo. Es más divertido aprender jugando, porque se aprende más”.

Por su parte, su compañero Benjamín Pittón señaló que “fue un recorrido muy lindo y además aprendimos qué son las leyes y qué son los derechos”.

“Me pareció muy lindo el Recinto, y la visita al Embajador me pareció muy divertida”, agregó.

En tanto, Alma Osudar consideró interesante todo el recorrido, “porque es algo que vos cotidianamente no te informás o no ves, y entonces, capaz no sabés lo que pasa acá; y cuando venís, la forma en que te explican hace que todo te llame la atención”.

“Me gustó mucho el Recinto, cómo nos lo mostraron con videos; y también el juego en el Embajador; está bueno aprender de esta manera, porque al hacer juegos, y que haya un robot explicándote, hace que te llame más la atención, que estés atento, y aprendés más jugando”, manifestó.

La docente Alicia Báez se refirió a la visita y señaló que superó sus expectativas y “la de los chicos también, porque los veo muy entusiasmados”.

“Habíamos comentado en clase al respecto, pero nos encontramos con algo superior a lo imaginado en todos los sentidos; desde lo que se refiere al edificio y su historia, hasta la explicación detallada de la obra de arte que se encuentra en el Recinto”.

“El hecho de que hayan jugado con un contenido tan importante, y que hayan aprendido jugando, convierte esta tarde en una muy provechosa, y que los chicos aprendan por medio de juegos es lo ideal, porque ellos en la competencia quieren superarse, y casi sin darse cuenta van fijando conocimientos muy significativos”, concluyó Báez.