Después de una semana ingresado por coronavirus, Alberto Belluci, de 101 años, recibió este miércoles el alta del hospital de Rímini (Italia) para volver a casa con su familia. Su caso es un ejemplo de esperanza en medio de una pandemia que afecta especialmente a personas mayores.
“Me habíais dicho que tenía que volver y he vuelto”, con estas palabras saludó el hombre a su familia listo para dejar el hospital. El COVID-19 no es el primer desafío al que se enfrenta Bellucci, que nació en 1919 en medio de la pandemia de gripe española y escapó de los alemanes tres veces durante la Segunda Guerra Mundial.
Su nieta Elisa cuenta en una entrevista con el diario La Stampa que estaban seguros de que su abuelo se recuperaría. “Siempre ha tenido un temperamento muy fuerte. Para darle fuerzas, cuando se lo llevaron al hospital le dijimos que los alemanes eran más fuertes que el virus, así que con más razón sobreviviría también esta vez”.
La vicealcaldesa de la ciudad, Gloria Lisi, ha querido mandarle unas palabras de ánimo y ha destacado que “incluso a los 101 años, el futuro no está escrito”.
Belluci continuará su recuperación en casa siguiendo las indicaciones de los médicos y acompañado por su familia que reconoce haber pasado miedo por la cantidad de personas que se morían solas “sin el abrazo de sus seres queridos”.
Ahora Bellucci solo tiene un deseo: descansar y comer algo caliente.
Fuente: Uffpost. Por Uxía Prieto.