Presentaron el Observatorio Astronómico del Parque del Conocimiento

El viernes último se presentó a la prensa el Observatorio Astronómico del Parque del Conocimiento de Misiones, el cual podría quedar formalmente inaugurado a partir de marzo próximo, con fines educativos, investigativos, disponible tanto para la comunidad científica como también para la comunidad en general, tal como lo establece el proyecto de ley del presidente de la Cámara de Representantes de la provincia, Carlos Rovira, de Derecho al Conocimiento Científico y Tecnológico de acceso público y gratuito.

La presentación estuvo a cargo del científico especialista en óptica astronómica, Luis Martorelli, acompañado de la presidente del Parque del Conocimiento, Claudia Gauto.

Con una cúpula de 12 mts y una óptica de 600 mm de diámetro, el telescopio del Observatorio Astronómico del Parque del Conocimiento se constituye como un pilar fundamental para el acceso de la población misionera a la ciencia de la astronomía tanto a nivel científico como social, filosófico y educativo.

De esta manera, los visitantes podrán disfrutar del cielo misionero con una calidad y precisión nunca antes vista, como en el caso de la Nebulosa de Orión, formadora de estrellas y sistemas solares, cuya distancia de 1,200 años luz la convierten en un objeto fantástico para su estudio y observación, incluyendo su núcleo de seis estrellas, las cuales se pueden ver a la perfección mediante el telescopio.

Además se podrán visualizar detalles excepcionales de la Luna, como sus cordilleras, valles y cráteres.

Descripción…

A nivel técnico, el telescopio consta de tres partes principales: la óptica, la mecánica y los accesorios periféricos.

ÓPTICA: consta de una configuración de espejos reflectores tradicional (tipo Cassegrain) diseñada en 1660 y típica de los grandes telescopios hasta la actualidad. Como en todo telescopio reflector, el primer espejo es cóncavo y el segundo convexo. Esta distribución geométrica de las ópticas hace que los rayos crucen por el agujero central del espejo primario hacia atrás y permite mirar por atrás como si fuera un telescopio común refractor. Pero hay más: antes de que los rayos lleguen al ojo, hay tres lentes correctoras, las cuales permiten que se pueda observar en el cielo un campo de visión más amplio además de minimizar defectos y aberraciones ópticas. Este instrumento trata de corregir todas estas aberraciones con esa mezcla de espejos y lentes, por eso se llama catadióptrico.

MECÁNICA: el tubo está colocado de tal manera que pueda contrarrestar la rotación de la tierra en su seguimiento de los astros a lo largo del cielo y a lo largo de la noche. El telescopio tiene una montura llamada “ecuatorial de horquilla”, que toma el tubo y rota paralelo al eje de rotación de la tierra. Esa horquilla está orientada al Polo Sur celeste y la mecánica de movimiento está controlada por servomotores y un programa de computadora que permite no sólo buscar los astros sino también mantener el guiado correcto y luego hacer todo tipo de fotografías u observaciones científicas.

ACCESORIOS: el telescopio cuenta con una serie de accesorios que, en este caso, fueron acondicionados para seis temas distintos, los cuales pueden ser utilizados en muchas cuestiones que tienen que ver con aplicaciones científicas, aplicaciones de extensión y de índole educativa.

Estos accesorios son: dos cámaras de alta resolución llamadas CCD y CMOS, ambas montadas en la misma cúpula y que, combinadas con 10 filtros, permiten obtener imágenes estelares con altísima definición evitando defectos producidos por la atmósfera, o incrementar de alguna manera el espectro visual de gases en algunos de los cuerpos que estamos mirando. Por ejemplo el oxígeno es azul, el nitrógeno es rojo, etc. Otro accesorio importante son los oculares, o sea donde se apoya el ojo. Este instrumento viene con dos oculares de última generación que permiten generar aumentos entre 180 y 250 veces la capacidad del ojo humano. Ambos, además, viene equipados con un anillo para conectar una cámara de alta sensibilidad.

Con condiciones meteorológicas favorables, el Telescopio del Parque del Conocimiento permitirá la observación directa de los planetas, Venus, Saturno, Júpiter y Marte, además de los cráteres, valles y montañas lunares. Esto posibilita el estudio de una diversidad de otros objetos que hay en el cielo, como las nebulosas, cúmulos globulares, galaxias y mucho más.