La misma fue presidida por el presidente Raúl Benítez y contó con la presencia de presidentes y delegados de los clubes integrantes. Además, estuvo presente el presidente de la Federación Misionera de Fútbol (FeMiFu), Juan Carlos Rossberg.
El objetivo de la reunión fue consensuar acciones para seguir insistiendo ante las autoridades provinciales en el pedido de la habilitación del fútbol federado. La FeMiFu ya presentó en tiempo y forma el protocolo sanitario a ser utilizado, pero hasta el momento no hubo respuesta favorable.
Se decidió enviar una nota al gobierno provincial por parte de la liga y de los clubes en apoyo a lo que ya se viene pidiendo desde la Federación Misionera de Fútbol. Es firme la decisión de volver y por sobre todo que sea con público, aunque sea un número reducido.
En ese sentido, Rossberg manifestó que la Federación mantuvo una reunión con dirigentes de otras federaciones y asociaciones deportivas de la provincia, “la situación que vivimos la viven todas las disciplinas que también tuvieron que parar por esta pandemia”, afirmó.
La situación económica de las instituciones deportivas es uno de los motivos fundamentales del pedido. «Los clubes no dan más y la mayoría está tan endeudado que no pueden recibir ayuda de ningún tipo» indicaron durante la reunión. Sin embargo, otro de los factores es el social, ya que al mantener inhabilitadas las competencias se pierde el objetivo central de los clubes. «Si no hay competencia los chicos buscan otros lugares para poder jugar al fútbol, esas competencias no cumplen protocolos y eso es mucho más peligroso en este contexto. En un club tenemos el espacio suficiente para cumplir con distanciamiento y aplicando los protocolos nos cuidamos entre todos», remarcaron.