Por: Lic. Anahí Fleck* – Especial para Reporte Misiones.
Casi que es de vox populi que para “ese” proyecto vas a tener que hacer el Estudio de Impacto Ambiental… Sin embargo ¿por qué? y ¿para qué?, parecen ser un eco lanzado al vacío, donde las preguntas rebotan sobre paredes que responden, – muy caro, -no sirve para nada, -nadie lo controla, y así, varias otras respuestas que poco tienen que ver con los verdaderos objetivos de los Estudios de Impacto Ambiental (EIA).
En la provincia de Misiones, y de acuerdo con la Ley XVI -Nº 35 (Antes Ley 3079), es deber el prevenir las conductas que produzcan efectos degradativos del ambiente dentro del territorio de la provincia. Además, la misma ley, plantea establecer definiciones, responsabilidades, criterios básicos y directrices generales para el uso e implementación de instrumentos que posibiliten conocer cualitativamente y cuantitativamente el efecto, ya sea positivo o negativo, de las acciones que plantee cualquier proyecto de intervención sobre el medio.
Todo eso bajo la responsabilidad de los ejecutores del proyecto y sobre los organismos contralores, Ministerio de Ecología y Recursos Naturales Renovables.
Cuando se realiza un estudio de impacto ambiental a un proyecto, se puede conocer la naturaleza de los efectos de las acciones sobre el medio biológico, social, físico, económico y político. En definitiva, de los ambientes en general, se trate de uno urbano, rural o natural.
Y es que el estudio en sí se convierte en una herramienta metodológica que permitirá diseñar medidas, lineamientos, estrategias, planes y programas para prevenir, mitigar y/o compensar los efectos negativos de las acciones sobre cualquiera de los medios mencionados.
Dicho de otro modo, cuando mediante un estudio de impacto ambiental se detecta que algunas acciones del proyecto poseen el carácter de negativas, éstas podrán prevenirse, en caso que puedan modificarse dichas acciones, mitigarse, cuando los daños sean reparables o compensarse cuando los daños sean irreversibles.
El ambiente es el espacio del cual dependemos para nuestra supervivencia, se trate de los recursos vitales, biológicos o sociales, ya que todos son partes intrínsecas de nuestro proceso evolutivo. La especie humana evolucionó en grupo, considerándose unos a los otros, los impactos que genera nuestra especie sobre el medio amerita atención, y los estudios de impacto son una de las tantas herramientas que tenemos.
Fotos: Lic. Anahí Fleck.
* Lic. Anahí Fleck: Licenciada en Genética, Maestrando en Gestión Ambiental . Consultora Ambiental Ministerio de Ecología N°60. Jefa de Trabajos Prácticos (JTP) simple, Facultad de Ciencias Exactas, Químicas y Naturales de la Universidad Nacional de Misiones.