«Tomé la decisión de ir a Miami. No está cerrado al 100 por cien, pero iré a jugar allá», sentenció Lionel Messi.
Lionel Messi tomó una decisión sobre su futuro luego de la salida del París Saint Germain: jugará en el Inter Miami de la MLS, club que tiene como presidente al ex jugador inglés David Beckham.
El futbolista rosarino que cumplirá 36 años en los próximos días no pudo concretar su regreso al Barcelona y optó por el torneo de Estados Unidos para continuar su carrera a pesar de que también tenía una oferta histórica de Arabia Saudita.
«Tomé la decisión de que voy a ir a Miami. Todavía no lo tengo cerrado al cien por cien. Me faltan algunas cosas pero decidimos continuar el camino. Si no salía lo del Barcelona, quería irme de Europa, salir del foco y pensar más en mi familia», expresó Messi en una entrevista con los medios españoles Mundo Deportivo y Sport desde su hogar en París.
Con respecto a las idas y vueltas en las negociaciones para regresar al Barcelona de España, el 10 contó: «Tenía muchas ganas, mucha ilusión de poder volver, pero después de haber vivido lo que viví y la salida que tuve, no quería volver a estar otra vez en la misma situación: esperar a ver qué iba a pasar y dejar mi futuro en mano de otro».
Y agregó: “Tuve ofertas de otros equipos europeos pero ni siquiera las evalué porque mi idea era ir a Barcelona y si no salía lo del Barcelona, analizándolo, pues salir del fútbol europeo y mucho más después de haber ganado el Mundial, que era lo que me faltaba para cerrar mi carrera por este lado y vivir la Liga de Estados Unidos de otra manera y disfrutando mucho más del día a día pero con la misma responsabilidad de querer ganar y de hacer las cosas bien siempre pero con más tranquilidad”.
Tras las declaraciones por parte del presidente Joan Laporta y del entrenador Xavi Hernández que acrecentaron los rumores de una segunda etapa en el conjunto catalán, Messi reveló que habló «muy poquito» con el mandatario y «muy seguido» con el técnico, quien también se había ilusionado con su presunta vuelta.
«La verdad es que lo económico nunca fue un problema para mí ni un obstáculo en nada. Incluso nunca llegamos a hablar del contrato ahora. Se pasó por encima una propuesta, pero nunca una propuesta formal, escrita, firmada, porque todavía no había nada y no sabíamos si se iba a poder hacer o no. Si hubiese sido una cuestión de dinero me habría ido a Arabia o a otro lado», prosiguió la «Pulga».
En cuanto al fin de su ciclo en el Paris Saint Germain de Francia, el rosarino señaló: «Con sensaciones encontradas. La verdad que el primer año fue muy difícil, como ya dije en alguna ocasión, por diferentes motivos. En el segundo, los primeros seis meses me sentí muy muy bien, muy cómodo en el club, en la ciudad, con mi familia. En el medio estuvo el Mundial y creo que condicionó mucho la temporada. Esperaba terminar de otra manera».