La ruta de la educación disruptiva: un sueño cumplido en Puerto Iguazú

Este lunes, en la sede del ITUREM, el gobernador Oscar Herrera Ahuad cumplió el primer capítulo del sueño de Franco Gallardo, un pequeño misionero innovador e inventor con una destacada trayectoria en la Escuela de Robótica Misiones. De esta manera, entregó al niño de 11 años, residente en Puerto Iguazú, un voucher que acredita su ingreso a la Escuela Secundaria de Innovación de Misiones en 2023, un kit de útiles y kit de impresora 3D.

El mandatario explicó que los materiales entregados a Franco “tienen que ver exclusivamente con la Escuela de Robótica y con la posibilidad de darle la oportunidad para seguir en ese avance de la vocación disruptiva que siempre pregonamos”. Dio cuenta que se le otorgan elementos para dar continuidad a sus proyectos creativos y le deseó muchísimo éxito, instándolo “a seguir estudiando y a hacer muchas cosas creativas”.

Además, aseguró que el trayecto disruptivo alentado por la provincia se expresa en la Escuela de Robótica a nivel primario, la Escuela de Innovación en la secundaria y el Silicon Misiones en un nivel superior.

Mientras, Franco, visiblemente sorprendido ante los obsequios y el anuncio de que continuará estudiando en la Secundaria de Innovación, agradeció el apoyo brindado a todas las personas que le ayudaron en su trayecto educativo y al Gobernador por los elementos recibidos, que sin dudas beneficiarán su vocación maker.

UN TRAYECTO DISRUPTIVO CON INVENTIVA MISIONERA

En octubre pasado, durante una visita a la localidad de Puerto Iguazú, el gobernador se acercó al Misiones Gamer. Allí lo esperaba Franco Gallardo, un niño de 11 años con sueños robóticos y un prototipo entre manos que sorprendió al mandatario: un dispensador automático de comida para animales. En ese momento, Herrera Ahuad lo felicitó, compartió la historia en sus redes sociales y lo invitó a crear algo similar, pero con agua.

Un mes y medio después, en el Makerland realizado el fin de semana pasado en el Parque del Conocimiento de Posadas, Herrera Ahuad y Franco volvieron a encontrarse, pero esta vez con el prototipo del dosificador de agua listo y el “desafío” superado. Fue entonces que el camino a la concreción del sueño de Franco se abrió y el gobernador, siguiendo la premisa de la política provincial de detectar y estimular el talento innovador, decidió concederle su deseo y reservarle un espacio para que el año próximo inicie sus estudios en la Escuela de Innovación en Posadas.

FRANCO, TALENTO INNOVADOR EN CARRERA

Franco Gallardo, tiene 11 años, es oriundo de Puerto Iguazú y alumno del Colegio Argentino Americano, donde está finalizando sus estudios primarios. Graciela y Martín, sus padres, cuentan que cuando tenía siete años y alentado por un espíritu curioso, comenzó a interesarse por la investigación, justo cuando se inauguró la Escuela de Robótica en Posadas. Fue entonces cuando decidieron hacer todo lo que estuviera en sus manos para acompañarlo en sus sueños, y así fue como logró inscribirlo en la Escuela de Robótica de Posadas, hasta donde viajaron cada sábado, y por dos años, desde Iguazú, para que Franco tomara sus clases y desarrollara sus proyectos.

“Su interés por la robótica y la tecnología comenzó desde que era muy chiquito”, cuenta su mamá y recuerda que desarmaba las computadoras de la casa “para ver qué había adentro”. Con mucha ansiedad recorrieron esos dos años los kilómetros que separan a Puerto Iguazú de Posadas, “salíamos a las 3 de la madrugada para que a las 8 Franco pudiera entrar a clases y nosotros lo esperábamos afuera de la escuela para regresar”.

Tras la pandemia se abrieron a lo largo y ancho de toda la provincia los Espacios Maker, y allí, en la ciudad de las cataratas, continuó Franco su camino innovador. “Vemos que tiene ese potencial y no podemos dejar de apoyarlo dentro de nuestras posibilidades”, explica Graciela. Así, el pasado 4 de octubre, Franco pudo mostrarle al gobernador su dispensador automático de comida para animales y su historia dio un giro. Asumiendo el “desafío” que en ese momento le planteó el mandatario, generar un prototipo similar, pero para administrar agua, Franco buscó la ayuda de sus “profes maker” para lograrlo y así llegó al Makerland de Posadas listo para cumplir con lo pactado y presentar su dosificador de agua automático.

Así las cosas y después de haber demostrado espíritu innovador y una gran pasión por la investigación y las nuevas tecnologías, el gobernador Herrera Ahuad decidió premiarlo y le entregó el voucher que acredita su ingreso a la Escuela de Innovación de Posadas, a donde la familia se mudará, para que Franco inicie el nuevo camino del mundo de la robótica y la innovación alentado y estructuralmente sostenido como política de Estado en una provincia que se proyecta al mundo también desde la economía del conocimiento.