Para revolucionar el mercado productivo e industrial nuestras instituciones se tienen que adaptar e incentivar la creatividad que en muchas ocasiones queda dentro del ámbito de lo intangible, basado en el diseño, el software, la marca, cuyo activo principal es el conocimiento y las habilidades de las personas.
Para eso es muy importante entender el valor de formar mentes creativas, personas apasionadas y soñadoras capaces de construir la cultura de la innovación.
El desafío mayor recae en que nuestros jóvenes sean protagonistas y se conviertan en agentes de cambio, que adquieran las habilidades y las capacidades necesarias para crear y agregar valor a las cadenas productivas de nuestras economías regionales, en un ecosistema de alianzas público – privadas que articule la escuela, la academia y las empresas para impulsar el desarrollo local.
Misiones tiene un modelo educativo flexible que se adapta a las demandas de la sociedad del siglo XXI, promueve la formación de los recursos humanos de los sectores que impulsan las grandes transformaciones, como la industria del software, de las tecnologías exponenciales en el marco de la globalización, se trata de áreas que crean millones de nuevos puestos de trabajo.
Cuando hablamos de economía del conocimiento, la clave es la innovación y el talento. Si pensamos en los profesionales y recursos humanos para esta industria, el liderazgo emprendedor, la mentalidad creativa, disruptiva, el enfoque STEAM (ciencia, tecnología, ingeniería, arte y matemática), las habilidades generales para la vida, la resolución de problemas, el pensamiento crítico, la adaptabilidad, la inteligencia social y emocional, la comunicación y la empatía se encuentran en la cúspide del universo de los trabajos del futuro, y en esta provincia abordamos la enseñanza de estas cuestiones desde las edades más tempranas.
Misiones como provincia Startup genera tendencia, cultura de la innovación, oportunidades para el desarrollo humano y local.
Sabemos que, en un contexto global de constante cambio, es importante pensar en la aplicación de políticas públicas integrales y de vanguardia para entrenar a las personas en una nueva modalidad, de alguna manera se trata de dotarlos de conocimientos y capacidades que les permitan amortiguar el impacto de los cambios disruptivos, ya sean tecnológicos o no, porque para estar a la altura de los desafíos que vienen vamos a necesitar algo más que ideas creativas que consigan producir nuevos servicios y productos de la economía del conocimiento.
En este sentido, la educación disruptiva nos impulsa a desarrollar capacidades claves para el futuro, las que nos permitirán adaptarnos y reinventarnos en entornos inciertos (inclusive hay una perspectiva de que en un futuro los empleos y las profesiones mutarán cada 10 años).
Misiones, con la visión de futuro de nuestro conductor, el ingeniero Carlos Rovira, lidera el camino de los nuevos paradigmas en la economía del futuro, con una clara estrategia política de mediano y largo plazo que nos permite adelantarnos para crear las condiciones que generen la infraestructura adecuada, la formación, capacitación y el impulso al desarrollo de la educación disruptiva para la consolidación de la generación de empleo de talento joven.
Con instituciones como el Polo Tic, el Silicon Misiones espacio de innovación y vanguardia, polo regional científico, tecnológico y formador de los empleos y las profesiones de la economía del futuro, que articula todo un sistema de colaboración, crea un ecosistema único para que podamos ser más competitivos en el escenario económico global y consigue contundentes resultados, que nos permiten afirmar un hecho admirable: en Misiones estamos formando jóvenes que trabajan para el mundo.
Son tiempos de intenso trabajo de logística de software, de desarrollo de ideas, de ciencia y tecnología, estamos haciendo un gran esfuerzo para diseñar el algoritmo que represente el potencial para las Startups y empresas en nuestros parques de innovación, que se desarrollaran en clave de colaboración con centros de transferencia científica y tecnológica, que aportarán al progreso, la investigación y construcción del conocimiento que alimentará a nuestros sistemas formales, impulsando una transformación sin precedentes.
Ante este escenario, se siente el apoyo de la sociedad misionera, estamos transformado realidades, y eso está a la vista.
Misiones es protagonista con su ecosistema disruptivo emprendedor, con nuestras universidades en alianzas con las mejores academias del mundo, creando futuro nos estamos adelantando al impacto del avance de la inteligencia artificial, de la computación y comunicación basada en física cuántica, la biotecnología, la nanotecnología y demás tecnologías disruptivas.
Las empresas vienen a quedarse en busca del talento misionero y del gran potencial de las nuevas oportunidades que nos traerán un nuevo puerto en términos de crecimiento de exportaciones, de incremento del comercio y relaciones internacionales.
Son todos resultados de la incansable búsqueda de bienestar y crecimiento para los habitantes de esta tierra sin mal. Estamos abriendo caminos, con visión de futuro, con ideas novedosas que impactan en nuestra población, generando entusiasmo y movilizando a las personas.
En medio de un escenario político nacional complejo, Misiones habla de transformación y evolución social y además concibe cuales son los motores que la impulsan, como la educación, la innovación tecnológica y el desarrollo de nuestra matriz productiva.
Tenemos compromiso político y moral con un proyecto llamado Renovación, cuyo equipo trabaja con pasión por hacer, porque somos líderes de nuestros sueños compartidos.
Somos inspiración para otras provincias y con su liderazgo regional en educación, ambiente y economía del conocimiento, tendremos un papel central en la Feria Nacional de la Economía del Conocimiento porque es una verdadera revolución lo que pasa en Misiones.