Según informó el INDEC, el fuerte incremento se produjo pese al congelamiento de tarifas y políticas de regulación de precios.
El año 2021 cerró con una inflación de 50,9% más de 18 puntos por encima de lo que había proyectado el ministerio de Economía cuando presentó el proyecto de Ley de Presupuesto 2022. Este resultado se produjo luego de que en diciembre el Índice de Precios al Consumidor (IPC) que mide el INDEC registrara un avance de 3,8%.
Así, el IPC volvió a tener un alza, tras el 2,5% registrado en noviembre. La inflación fue la cuarta más alta del año, detrás de marzo (4,8%), abril (4,1%) y enero (4%); y la más alta del segundo semestre.
También la inflación de 2021 fue la segunda más alta desde 1991 -el récord fue el de 2019- y fue impulsada básicamente por las subas en los alimentos -que acumularon un incremento en doce meses del 50,3 por ciento. Otro rubro con subas muy por encima del índice general fue indumentaria, que cerró 2021 con un alza del 64,6 por ciento.
Por su parte, la llamada inflación núcleo (que no incluye los servicios regulados y bienes estacionales) acumuló en doce meses un incremento del 54,9 por ciento.
Los precios que más aumentaron
En el caso puntual de diciembre, el rubro con una mayor alza fue “restaurantes y hoteles” (5,9%), seguido por “bebidas alcohólicas y tabaco” (5,4 por ciento). Los alimentos en promedio tuvieron un incremento del 4,3%, impulsados por las subas en carnes, panificados y lácteos.
La lectura que hicieron en el Gobierno del número oficial fue que en diciembre por tercer mes consecutivo se registró una desaceleración en términos interanuales. Sin embargo, el optimismo oficial contrasta con otros datos: el índice de diciembre es el más alto desde abril -cuando la inflación había tocado el 4,1%- y
La marcada aceleración del costo de vida preocupa a los economistas en un contexto donde las tarifas están congeladas y el Gobierno intenta frenar la inercia mediante acuerdo de precios.
Fuente: Telam