De acuerdo a una consulta realizada por Gleeden -web y aplicación especializada en encuentros extraconyugales-, las Cataratas del Iguazú fueron elegidas como uno de los destinos favoritos por quienes ya piensan en «escaparse de trampa» el próximo fin de semana largo, sin que les pese en la conciencia que justo sea por celebrar la Semana Santa.
Pero no sólo estas personas ya encontraron su destino para encontrarse con un amante, sino que además ya tienen pensada la excusa para no despertar las sospechas de la pareja.
Según el informe de Gleeden, algunas personas infieles ya encontraron la excusa para poder escaparse con sus amantes el próximo fin de semana largo: el 51% menciona un seminario profesional y el 42% opta por decir que la pasarán entre amigos, mientras que el 7% restante afirma que todavía no encontró el pretexto.
Entre los destinos más elegidos, en segundo lugar se ubicaron las Cataratas del Iguazú con el 24% de las preferencias, detrás de Mendoza (32%), mientras que, detrás del destino misionero, siguieron Ushuaia (18%), El Chaltén (11%) y Tandil (8%).
¿Por qué las Cataratas del Iguazú?
Desde la empresa que realizó la encuesta destacan que, en el último año, fue uno de los destinos más elegidos por los turistas. Es que no hay dudas: es una de las siete maravillas naturales del mundo y merece ser visitada. En este lugar, se puede hacer de todo. Desde una caminata hacia la Garganta del Diablo y los senderos del Parque Nacional, hasta otras actividades más románticas como el “Bautismo de las Cataratas” o el Paseo de la Luna Llena.
Sin importar el itinerario, este destino lo tiene todo: hotelería, gastronomía y frutas tropicales, que pueden ser un gran afrodisíaco e invitar a probar nuevas experiencias.
Historias reales…
Cabe recordar que a mediados de noviembre del año pasado un hombre domiciliado en Buenos Aires le dijo a su esposa que iría a una reunión de negocios en Tigre, sin embargo la mujer -con la cual tuvo cuatro hijos- sospechando de la actitud de su cónyuge decidió seguirlo, para sorprenderlo en un hotel de Puerto Iguazú, donde el marido le estaba siendo infiel con su propia sobrina.