Con una peregrinación náutica y terrestre se conmemoraron los 397 años de la llegada de la 1° Misión Jesuítica, conocida como Santa María del Yguazú. Este miércoles por la tarde, el gobernador compartió la celebración navegando por el río Iguazú.
Este miércoles por la tarde, se realizó una peregrinación náutica y terrestre conmemorando los 397 años de la llegada de la 1° Misión Jesuítica, conocida como Santa María del Yguazú, establecida en cercanía de las Cataratas. El gobernador Oscar Herrera Ahuad acompañó la peregrinación náutica que partió de Puerto Macuco hasta el puerto de la Ciudad de las Cataratas, en la que participaron más 240 personas, distribuidas en cuatro lanchas, que navegaron por el río Iguazú.
Durante la travesía, en una de las embarcaciones viajaba un coro que cantaba alabanzas, y la imagen de la vírgen viajaba en la lancha principal, donde además cada uno de los tres obispos presentes hizo uso de la palabra. Al arribar al puerto de destino, una multitud los aguardaba para sumarse al tramo pedestre de la peregrinación rumbo al Hito Tres Fronteras.
Entre los asistentes al evento estuvieron el intendente de Puerto Iguazú, Claudio Filippa; el ministro de Coordinación de Gabinete, Ricardo Wellbach; el cónsul de Paraguay en Puerto Iguazú, Magno Antonio Álvarez Alarcón; el obispo de Puerto Iguazú, Nicolas Baisi; el obispo de Foz de Iguazú, Sergio de Jesús Borges de Amaral y el Obispo de Ciudad del Este, Guillermo Steckling.
Conmemoración de un pasado histórico
Vale resaltar que el Obispo de la Diócesis de Iguazú, Monseñor Nicolás Baisi, fue el impulsor de la primera peregrinación, con el apoyo de representantes del municipio, de la Prefectura Naval Argentina, Policía de Misiones, representantes del Consulado de Paraguay y de empresas ligadas a la actividad náutica con el objetivo de conmemorar de los 397 años de la instalación de la Primer Reducción Jesuítica en lo que hoy es el territorio de Misiones y estaría ubicado en lo que actualmente se conoce como Puerto Macuco, donde comienza el recorrido de la gran aventura. En ese sitio se han concretado recientemente hallazgos arqueológicos que confirmarían la presencia de los Jesuitas en el lugar, tal como detallan los escritos de los misioneros.