Elecciones 2017: ¿qué es lo que verdaderamente se debate?

Aunque por lo general las elecciones legislativas no han tenido la relevancia que las generales (cuando también se eligen cargos ejecutivos), el próximo domingo 22 la trascendencia de los comicios para Misiones –como para gran parte del país-, es mayor de la que podría esperarse: se disputan los intereses políticos y sociales de la provincia, en una clara confrontación de modelos, el nacional y el misionero.

A nivel nacional, Cambiemos con los colores presidenciales gana terreno como una gran marca que se posiciona en el mercado evitando las discusiones territoriales, para plantear una fuerte campaña basada fundamentalmente en dos conceptos:

–          Ver que un importante sector de la ciudadanía argentina está cansada de la falta de alternancia en el poder (por eso mismo surge Cambiemos como marca).

–          Nacionalizar la discusión y resumirla a Mauricio Macri vs Cristina Fernández de Kirchner, y utilizar todo el poderío mediático y de las redes sociales (RRSS), para conflictivizar esta dicotomía.

En este punto, para muestra basta un botón dice el adagio popular, San Luis en las pasadas elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), después de 34 años los Rodríguez Saá perdieron la contienda electoral previa por más de 10 puntos, en lo que fue otra clara muestra de lo local vs lo nacional, y un mensaje de la ciudadanía hacia la alternancia en el poder.

¿Qué es lo que ha logrado Cambiemos?

A priori, la lectura es muy simple: interpretar lo que quiere escuchar la mayor parte del electorado e incorporarlo en un discurso sostenido por los principales grupos mediáticos y las RRSS. Algo así como la persona casada que le promete a su amante que pronto se va a separar, y aunque no cumpla, mantiene la esperanza intacta en la otra parte.

Porqué el “aunque no cumpla”, porque claramente detrás del fuerte discurso del partido gobernante a nivel nacional, hay cosas/situaciones y personas que en realidad no representan cambio alguno.

Si tomamos las tres acciones más cuestionadas del gobierno de Cristina, vemos claramente que Macri en su presidencia también incurre en esos vicios, con la gran diferencia que al tener a los principales medios de su lado, pasan casi desapercibidas para la gran mayoría de los argentinos.

Es que al igual que la Ley de Lemas, hay temas que son muy cuestionados cuando un frente político ejerce el rol de oposición, pero luego los sostienen al llegar al poder por encontrar ahí la posibilidad de servirse a su conveniencia.

¿Acaso no fue uno de los principales cuestionamientos de la oposición, Cambiemos inclusive, en Misiones a la falta de internas en el oficialismo provincial, pero al momento de ir a las PASO, ellos tampoco ofrecieron a la ciudadanía una segunda opción?

La estrategia discursiva en la cual saben lo que una porción del electorado quiere escuchar, pero esto no significa que se traduzca linealmente en una conducta.

Este mismo análisis no lo han podido lograr implementar con claridad ni eficiencia los partidos provinciales gobernantes, que por lo general hacen una gran labor territorial, pero con el mensaje equivocado.

No siempre alcanza con resolver los problemas que para el gobierno son importantes, sino que es fundamental poder interpretar qué es importante para cada sector, y trabajar en función a ello, aunque el gobierno sepa que no significa una solución de fondo.

Sólo para dar un burdo ejemplo, la política de un gobierno local puede tener como eje la conectividad vial, lograr que no existan más calles de barro, para que todos los vecinos puedan salir de sus casas o chacras incluso en las peores condiciones meteorológicas, asegurando además el ingreso de las líneas de colectivo, de la recolección de residuos, etc., sin lugar a dudas una verdadera solución que permite mejorar la calidad de vida de la gente. Pero, sin embargo, para los vecinos de esa zona la única conectividad que más les importa en ese momento es poder contar con WiFi, dado que no les interesa tanto salir de sus casas como el poder utilizar las aplicaciones de sus smartphones (y por absurdo que parezca, no está muy alejado de la realidad).

Misiones lleva 14 años de un gobierno en el cual se pueden visualizar grandes logros para los hoy ya 76 municipios, cuestiones estructurales y que repercuten en forma directa en la calidad vida de los misioneros, con fuertes desarrollos en salud, educación, vial, entre otras, y muchas de estas políticas de Estado tienen una visión a futuro, como la Escuela de Robótica.

Sin embargo, aún hay sectores de la población que no asumen como propios estos logros, sino que tienen las expectativas puestas en lo inmediato. Tampoco el concepto misionerista generó la adhesión popular que era esperada, algo que también es difícil de conseguir en una población tan diversa como la de una provincia considerada Crisol de Razas.

Sin embargo, el objetivo de ese llamado, del misionerismo, es tratar de encontrar el eco suficiente en los misioneros para defender una identidad y un sentido de pertenencia, que claramente no es compartido por el esquema nacional.

Ahora bien, en Misiones se da un proceso por demás curioso:

Cambiemos, en su propuesta electoral, lleva como principales candidatos en primer término a un hombre que fue funcionario cuando se llevó adelante la gran quita salarial para los docentes, policías, enfermeros, médicos y demás trabajadores del estado ascienda hasta el 33% (13% de descuento por decreto de la Nación, más hasta un 20% de quita de los sueldos en concepto de Impuesto Extraordinario, Transitorio de Emergencia –IETE-).

Cabe recordar que durante la administración de Ramón Puerta, Humberto Schiavoni ejerció diversos cargos públicos como subsecretario de Industria y Economía, ministro de Economía, interventor del Banco Provincia de Misiones y presidente del Comité de Privatizaciones de Empresas Provinciales.

En segundo lugar aparece un histórico dirigente radical, Luis Pastori, quien más allá de su perfil político, lejos está de representar un recambio en la política misionera.

En la vereda del oficialismo, el Frente Renovador ofrece una lista en la que el primer nombre en aparecer es Maurice Closs -quien fue uno de los fundadores de la Renovación al conformar el frente conducido por el actual presidente de la Cámara de Representantes, Carlos Rovira-, y cuyo rostro estuvo presente en prácticamente todas las boletas desde entonces.

Sin embargo, por debajo sí aparecen figuras que en su gran mayoría son debutantes electoralmente hablando, caso del actual subsecretario de Gobierno, Ricardo Wellbach, o bien quien encabeza la lista de diputados provinciales, el dr. Martín Cesino, subsecretario de Atención Primaria de la Salud, ambos con una gestión de fuerte base territorial.

Resulta paradójico que quien ofrezca una mayor alternativa electoral sea el oficialismo, mientras que Cambiemos recurra a personalidades históricas para los principales cargos nacionales.

En fin… esto es un mero análisis político comparando lo que los discursos proponen, ahora bien, en qué lugar queda Misiones en esta contienda electoral…

 

N.F.U.

Reporte Misiones