En la Picada Aguas Blancas, de Dos de Mayo, un grupo de trabajadores nucleados en la Agrupación de tareferos del Movimiento Evita de esa localidad, están construyendo un merendero comunitario para cientos de familias a las que cada vez se les hace más difícil alimentar a sus hijos e hijas.
El referente de la agrupación, Víctor Dos Santos, señaló que están trabajando arduamente con un grupo de sus compañeros y compañeras en la construcción de lo que será un salón que lo utilizarán como un comedor comunitario y merendero.
«Ahora estamos en las tareas de cosecha; pero cada vez que tenemos un tiempo libre, ponemos manos a la obra con el armado de un nuevo merendero porque hay otros más alejados, y ya casi estamos finalizando, nos falta muy poco» cuenta entusiasmado.
Dos Santos expresa que el sueño que persiguen para más adelante es poder construir una Cooperativa de Trabajo, pero reconocen que los merenderos son de gran ayuda para la mayoría de los sectores en situación de pobreza. «En general no hay trabajo, en nuestro sector, por ejemplo, cuando termina el ciclo de la yerba mate, las familias tareferas lo pasamos muy mal», dijo.
Víctor Dos Santos consideró que en Misiones, los tareferos son el último eslabón de la cadena de la yerba mate. «Todos las personas que toman mate, tienen que saber que dentro de la cadena productiva, somos el eslabón más débil y los que menos ganamos. Queremos que eso en algún momento cambie, y estamos convencidos que es una decisión política, así como la decisión de que cada vez haya menos condiciones de pobreza entre los misioneros.
Necesitamos estar agrupados sobre todo en esta época de malos momentos económicos para nuestras familias empobrecidas. Nuestros niños y niñas tienen derecho a vivir mejor. A veces un hijo de tarefero es mal visto por toda la sociedad y lo discriminan, y eso es injusto, porque los tareferos somos parte de esta sociedad. El objetivo es formar una Cooperativa de Trabajo para salir a flote en los momentos en que no tenemos cosecha, y poder aliviar los días amargos cuando en las casas no entra ni un solo peso», lamentó.
Otro de los tareferos, Miguel Villalba vive en la Picada Aguas Blancas desde hace muchos años. Meses atrás participó de una reunión con sus compañeros tareferos, los vecinos y el diputado Martín Sereno (Partido Agrario y Social), donde se discutió la problemática de las familias, y surgió la inquietud de construir un merendero.
«Nos pareció una muy buena idea porque cuando termina el cosecha de yerba nuestras familias pasan hambre, y también nos entusiasma la idea de armar una Cooperativa de Trabajo», sostuvo.
La mayoría de los trabajadores coinciden en esa preocupación y en la necesidad de que sus familias estén mejor.
«Hace tiempo formamos nuestra agrupación dentro del Movimiento Evita, precisamente porque vemos que la crisis aprieta y si estamos todos juntos es más fácil ayudarnos para salir adelante. Con esa misma intención nos dispusimos a la construcción del merendero para que todos los chicos tengan una merienda, una comida, y puedan crecer sanos», señala Miguel Ángel.
También las mujeres colaboran con ese proyecto, así lo afirma Yésica que pertenece al Movimiento Evita de Dos de Mayo.
«Me uní al grupo porque me gustó la propuesta de pensar juntos como sobrellevar esta crisis. Estamos haciendo el merendero para que nuestros hijos y todos los chicos de la zona tengan un alimento diario, y más adelante poder conformar una Cooperativa de Trabajo como una salida laboral.
Tenemos el respaldo de Martín (Sereno) que está siempre que lo necesitamos, lo mismo que nuestro referente Víctor (Dos Santos). Todos pertenecemos a familias trabajadoras, y sabemos del sacrificio de sobrevivir con el esfuerzo de las familias que tenemos pocos recursos económicos, pero muchas ganas de salir adelante».