Novak Djokovic es el rey de Australia, el campeón masculino más laureado de su historia con siete títulos, rompiendo el empate a seis con Roger Federer y Roy Emerson. Conquisto su decimoquinta corona de Grand Slam como el actual número uno mundial que es, ofreciendo un recital de tenis total que ha arrasado a Rafa Nadal, que ha sufrido su derrota más contundente en 25 finales “grandes”, ya que no ha ganado ni un set, algo inédito hasta esta ocasión.
“Nole”, no le dio respiro a Nadal, (6-3, 6-2 y 6-3 en 2hs.04 ). Muy lejos de las casi seis horas del duelo de 2012. El Serbio, que aumenta su domino sobre el español, a quien vence en los duelos frente a frente por 28-25.
Se esperaba mucho de la final porque ambos llegaban al máximo de sus condiciones y sin desgaste físico. Djokovic rubricó este estado mágico, Nadal dio síntomas de lentitud y falta de convicción desde el comienzo, cuando entregó su saque, algo que no sucedía desde la jornada inaugural del torneo. Enseguida 3-0 del balcánico, que ganó cuatro juegos consecutivos en blanco con su servicio, 20 de 21 puntos en la manga inicial.