Hace unas semanas, unas 200 familias del pequeño paraje Gisela, que pertenece al Municipio de Colonia Polana daban cuenta de su gran preocupación por la falta de agua potable que padecen desde hace siete años; pero que con la situación de pandemia por el Coronavirus, la necesidad se vuelve imperiosa ante el control de la higiene que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Esta inquietud le manifestaron al diputado Martín Sereno (Frente Popular Agrario y Social) que estuvo en el Municipio administrado por la intendenta Antonia Medina (FR), llevando insumos a un grupo de familias que trabajan en un proyecto productivo de alimentos agroecológicos.
«El Municipio está totalmente abandonado, y la prueba más contundente es la pobreza extrema de Colonia Gisela, con sus barrios de calles de tierra en pésimo estado y que en días de lluvia son intransitables. No cuentan con atención en salud y muchas familias carecen de agua potable; un problema que no es de ahora, sino desde hace siete años.
El agua es un derecho humano básico, y en estos momentos de Emergencia Epidemiológica y Sanitaria es inhumano carecer de ese elemento vital», sostuvo Sereno, que inmediatamente comenzó a buscar soluciones.
El pozo perforado permitirá la provisión de agua
Afortunadamente, las gestiones que realizó el legislador dieron sus frutos y tuvo rápida respuesta del titular del Ente Provincial de Agua y Cloaca de Misiones (EPRAC), Daniel Di Stéfano, y a través del Instituto Misionero de Agua y Saneamiento (IMAS), a cargo de Joaquín Sánchez, arribaron las máquinas al lugar y estuvieron trabajando en la perforación del pozo, en un terreno donado por una de las vecinas de Gisela.
En su momento tuvieron un pozo perforado; pero después una empresa compró la tierra donde estaba ubicado, el pozo se secó y el tanque quedó tirado y abandonado. El resultado fue que cientos de familias quedaron sin agua, y tenían que recurrir a un arroyo ubicado en bajada a unos 250 metros y cargar baldes para el uso cotidiano.
Vecinos y vecinas aplaudieron la llegada de las máquinas
Ante el arribo de las maquinas, las familias de la colonia expresaron su inmensa alegría: «No podíamos creer cuando vimos que llegaban los camiones de la empresa para hacer el pozo. Estamos muy contentos y agradecidos con la posibilidad de tener agua porque desde hace siete años era una lucha constante.
Ahora vemos que las gestiones del diputado del PAyS y nuestra unión como vecinas, entre ellas Cristina Vera, una de las primeras que se movilizó con su gran empuje, dieron resultados», indicó Graciela Duarte.
«Agradecemos de todo corazón que por fin el Estado se haya acordado de nosotros, de nuestros hijos, porque en esta cuarentena ya no sabíamos más que hacer para la limpieza sufriendo por falta de agua. En un lugar con tantos chicos, la higiene es más que necesaria», dijo Alicia.
Vani Duarte también remarcó la felicidad de la colonia: «Tengo tres chicos y el agua para nosotros era una necesidad muy importante. Cuando decretaron la cuarentena nos desesperamos porque sin agua es imposible estar, y aún yendo y viniendo al arroyo veinte veces no dábamos abasto.
Sabemos que esto fue gracias al compromiso el diputado Sereno que vino, recorrió la colonia y se ocupó de nosotros. Estamos muy agradecidos», reiteró la mujer.
En la mismo sentido se manifestó Ramón Aquino: «Hace cinco años que vivo en Gisela, tengo siete chicos y recién ahora tenemos la esperanza de que con el pozo perforado y el tanque la esperanza de agua se convierte en realidad para beneficio de todos los vecinos», enfatizó.