Durante la última sesión del Concejo Deliberante capitalino los ediles convirtieron en Ordenanza el proyecto presentado por el defensor del Pueblo, Alberto Penayo, para regular los establecimientos de larga estadía, o geriátricos, de la ciudad de Posadas.
La capital de la provincia carecía de una norma que regule la habilitación y los controles de estos establecimientos, convirtiéndolos en contextos de encierro sin control ni acompañamiento, carentes de derechos humanos.
Esta irregularidad fue detectada por el Observatorio de Adultos Mayores, organismo interinstitucional creado en el ámbito de la Defensoría del Pueblo, en múltiples intervenciones en las que fue siendo cada vez más evidente la ausencia de normas reguladoras.
Por esta razón, Penayo, impulsó una serie de propuestas con el objeto de que el Estado debata una norma que regule el funcionamiento de los geriátricos.
Finalmente, presentó un proyecto de ordenanza con el objeto de regular todos los estadíos de estos establecimientos, teniendo en cuenta los derechos humanos de los adultos mayores.
El proyecto fue aprobado y se convirtió en Ordenanza en la última sesión realizada el pasado jueves.
«Esta Ordenanza es solo el inicio de una ciudad más amigable con las personas mayores, el reto está en conseguir un entorno saludable y seguro, una ciudad accesible, una buena oferta cultural, servicios sociales y sanitarios de calidad y adaptados a todas las necesidades», recalcó el ombudsman.
«Entendiendo además, que una ciudad acogedora y accesible con las personas mayores, es una ciudad amigable con todos sus residentes, ya que al final, cada uno de nosotros tenemos un potencial adulto mayor en nosotros», concluyó el defensor.