River ganó en modo montaña rusa, empezó como una verdadera máquina con una ventaja de dos goles antes de los diez minutos, estuvo dormido en el desenlace del partido hasta sufrir el empate y, en el tramo final, se despertó y redondeó un 4-2 sobre Argentinos Juniors en un partido de alto nivel.
Matías Suárez, con una sutil definición sobre la salida de Federico Lanzillota tras quedar mano a mano, y Enzo Fernández, a través de un tiro de media distancia que se le metió a al arquero por el primer palo, habían puesto al equipo de Gallardo 2-0.
Pero increíblemente, cuando el trámite parecía sencillo, River mermó y Argentinos logró descontar en su mejor momento. El cabezazo para acortar distancias lo metió Gabriel Ávalos, a los 39.
A partir del descuento animó a picar al Bicho. Por eso, salió al segundo tiempo a empatarlo, y lo consiguió en apenas cinco minutos. Lucas Villalba entró solo por el segundo palo y metió un zapatazo a media altura que Díaz intentó sacar en la línea pero que se metió de lleno.
El gran llamado de atención obligó al Millo a despertarse de la siesta. Entonces, a los 67, se conectaron Quintero y Álvarez en una jugada que originó el tercero. El colombiano habilitó al juvenil, Araña amagó, remató y Miguel Torrén la frenó con la mano cual arquero. Penal, expulsión para el defensor y 3-2 por la conversión del Diez.
Sobre el final, Marcelo Andrés Herrera, el reemplazante de Robert Rojas, entró por el segundo palo dentro del área y le puso cifras definitivas al match, que fue digno de una liga de élite.
Partidazo el que ganó River, que se trepó al segundo puesto de la zona A con 19 puntos y está a dos de Racing.