Un empleado que se desempeñaba en la Estación de Transferencia Terminal UNaM fue detenido este martes, tras ponerse al descubierto una estafa a partir de la venta de boletos “truchos” en la Ventanilla de Expendio, afectando a usuarios del transporte urbano de pasajeros, quienes durante más de tres meses fueron víctimas de esta maniobra fraudulenta.
El mecanismo de estafa pudo ser detectado tras una investigación llevada a cabo por la propia firma SUSA (Servicios Urbanos Sociedad Anónima), que opera la Terminal de Transferencia, tras los frecuentes rechazos registrados en los molinetes que permiten el acceso a los andenes.
De acuerdo a la información a la que pudo acceder REPORTE MISIONES, se trata de un empleado cuyas siglas son D.E.F., quien fuera asignado por la empresa al puesto de la Ventanilla de Expendio, donde se venden boletos a las personas que no cuentan con la tarjeta SUBE Misionero.
La maniobra clandestina, que según se supo en la investigación, se venía llevando a cabo sistemáticamente desde enero, era muy sencilla: el vendedor cobraba a los usuarios el valor del boleto ($28 sin la SUBE), pero en vez de emitirles el boleto original –que contiene un código QR y un número de serie único y correlativo-, les daba uno trucho.
Este boleto falso, como no podía ser de otra manera, no pasaba por el lector del molinete que se encuentra en la Estación de Transferencia y permite ingresar a los andenes, cuando el usuario volvía a la Ventanilla para hacer el reclamo, el perpetrador de la estafa argumentaba que había una “falla en el sistema”, y los hacía pasar por medio de una activación manual del molinete.
Preso de su propia trampa… con la persistencia del supuesto “error de sistema”, que llamaba la atención tanto usuarios como al propio personal de la empresa SUSA, se realizó una inspección de los equipos y el sistema informático, resultando tras la prueba técnica que los mismos funcionaban con normalidad.
Esta auditoría arrojó que desde el 10 de enero hasta el 22 del mes en curso, la falla se daba por códigos inválidos (debido a copias de boletos que ya habían sido utilizados), y esta situación se registró sólo durante los días y horarios que D.E.F. se encontraba a cargo de la Ventanilla de Expendio.
Como parte de la investigación, este martes un inspector de la empresa que opera la Estación de Transferencia, realizó una fiscalización en el lugar y durante el turno de trabajo de D.E.F., oportunidad en la que en poco tiempo detectó al menos a cinco personas afectadas, siendo esta prueba la que finalmente terminó con la detención del estafador por parte de la Policía de la Provincia.
“Se metió con los más humildes, los que usamos el colectivo por necesidad, sin contar la vergüenza y mal momento que nos hizo pasar cuando con naturalidad íbamos hasta el molinete, y mientras otras personas esperaban atrás nosotros no podíamos acceder y no sabíamos por qué era”, recalcó uno de los denunciantes.
Por tipos como ese el país está de esa manera, últimamente hacía mucho ECO eso de que había problemas con boletos y sube, por fin encontraron al responsable, felicito a quienes investigaron y dieron con ese delincuente.